Esta vez en lugar de pedir por un buen 2012, en realidad nació en mí la necesidad de agradecer el año 2011 que pasó, con todo mi corazón y, me parece una buena idea compartirlo con ustedes para instarlos a que detengan por un minuto el pensamiento y piensen que es bueno agradecer lo que se nos dio, lo que se nos negó pero fue para nuestro bien seguro.-
Esta joven empresa Oveja Rebelde, quiere agradecer todo el apoyo brindado por la Universidad del Centro, a través de su tutoría, a la SEPYME, sin la cual el emprendimiento no hubiese podido realizarse, su equipo de hilanderas, tejedoras, artesanos, sus clientes y, a todos aquellos que de alguna manera nos van ayudando en todo el camino emprendido, a la familia sin cuyos consejos, apoyo y críticas tampoco creceríamos y a los que nos dan una mano con los stands, ferias y demás.-
Por eso, ahora sí, FELIZ AÑO 2012 a todos y todas